Autor: reiterstahl

La Novísima Teoría del Contra.

Tal como el gore, que disfruta de destrozar anatomías de forma ficticia frente a la cámara, nosotros seres humanos racionales desde tiempos inmemorables disfrutamos de las caracterizaciones y venturas propias del contra. El contra, ya una vez superado el contraculturalismo, se enfoca ahora en un nuevo movimiento igualmente contra tendencioso pero poco más básico: el no por no, el no certero y apabullante.

De repente tendemos, ilusos nosotros, a pensar que los nuevos tiempo ofrecen más o menos mejores cosas que los antiguos. Ni uno ni lo otro, ciertísimo, otrora la gente no tenía Internet y aún así vivía, eran tiempos difíciles. Como todo tiempo pasado ensalzado por el presente. Soy de los que siente que las cosas se deben vivir una vez en la vida, varios momentos en su haber, pero no reiteradamente tirando atrás en nuestro pensamiento. Las cosas se van viviendo una a la vez por algo, hasta que queremos más.

La Novísima Teoría del Contra, acá puesta en manifiesto por primera vez, nos recuerda que incluso en tiempos modernos siempre tenemos algo que romper. Romper es ahora el acto universal, todos buscan algo que los demás no tienen, para extrapolarlo a sus vidas. El fenómeno hipster vino a poner de moda, una vez más, que los movimientos de negación aún tenían algo por avanzar. Ya nadie quiere ser básico aunque todos lo sean, la música como fenómeno cultural ha venido a destrozar esquemas de buenas prácticas. Antes los bandos eran más bien pocos, ahora las opciones son tantas que cada cuál busca lo que necesita y gusta y, si no lo encuentra, lo crea. Una situación, a todas luces, más que romántica.

Nacimos para negar, asentir, romper, crear, esperar, actuar, callar, hablar, hacer, deshacer, sentir, dejar de hacerlo… y tarde o temprano para justamente aceptar que queremos ir en contra a lo convenido, para llegar alto, alto y contra.


VV Cephei A

No Somos Nada. Punto.


Fuego

Dudo de cualquiera que no se deje impresionar por el fuego.


Dios & Sagan

«La idea de que Dios es un hombre blanco más grande de lo normal con una barba flameante que se sienta en el cielo y cuenta la caída de cada gorrión es ridícula. Pero si por Dios uno quiere decir el conjunto de leyes físicas que gobiernan el Universo, entonces claramente hay un Dios así. Este Dios es emocionalmente insatisfactorio… no tiene mucho sentido rezarle a la ley de gravedad»

Carl Sagan
en «Scientists & Their Gods»


Daybreak

La Música <3 La pueden descargar desde acá


Antichrist Superstar


No es el lugar

El costo siempre tiene a ser alto cuando la contrapartida obtenida es alta si alta como puede resultar ser la utilidad práctica por nosotros vislumbrada ante los ojos de los demás no es claro que importe sobre manera lo dicho por los demás pero debemos o más bien tenemos que actuar acorde a lo que demostramos ser a lo largo del tiempo ya no estamos para tonterías insisto y el tiempo que no se deja de ir cada segundo restando segundos a lo que somos nos dejaría con facilidad en nuestro pequeño micromundo virtual generado por espectro visual reducido espectro que no es solo lo que definimos sino también lo que tenemos que temer es lo más natural y humano que hemos logrado a lo largo del tiempo siempre perdido de una u otra forma pero posteriormente ganado por nuestra insistente naturaleza de pensarnos conocedores de lo acontecido y de lo que acontecerá que sépase no es que precisamente nos guste lo ignoto porque esto nos priva de saber y conocer lo que deseamos de nosotros y de los que nos rodean porque rodear es lo que hace la gente ahora rodear y rodearse de cosas que les permitan delimitar su mundo como el jardín de Kosinski pero a una escala menor y vulgar puesto que este al menos resultaba ser algo más noble en sus fines y medios y no en ninguno como ningún momento resulta malo para pensar en lo añorado y la forma de obtenerlo que resulta ser nuestro fin para después de todo salir avante con un poco y decepcionado con otro tanto como si en el fondo la verdad fuera justa e importante para lo que llegaríamos a llamar vida pero hasta después que ahora mismo solo podemos llegar a pensar que quizá estemos en el momento y lugar correcto pero en el plano incorrecto. Quizá este no sea el lugar.